La Virgen de la Candelaria, para nuestro pueblo representa la Pachamama, en la Anata desde tiempos inmemoriales celebramos lo que nos regala la tierra danzando al compás del viento, el bombo y la luna, en Candelaria confluyen todos los dioses telúricos en la más grande celebración de nuestro pueblo.
Es por eso que en el altipampa cada febrero es mágico, las calles de Puno son tomadas por los colores, cantos colectivos y música, traídas por cada pueblo del extenso territorio puneño, ellos celebran su cultura.
Puno es magia, diversidad y fe, sobre todo durante la mayor expresión artística popular del Perú y una de las más importantes del mundo, ya lo dijo José María Arguedas: “Este desfile en los Campos Elíseos o en la Quinta Avenida de Nueva York causaría deslumbramiento y despertaría en los espectadores inquietudes jamás suscitadas antes en el corazón y la conciencia de esos públicos.”
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